Una antigua leyenda japonesa relata que la diosa del sol Amaterasu, tremendamente molesta con su travieso hermano, se había ocultado en una caverna y tapado la entrada con una roca, provocando un eclipse. Los hombres, temiendo que el sol no volviera, construyeron por consejo de un sabio una gran pértiga para pájaros y colocaron allí todos los gallos del pueblo. Cuando los gallos comenzaron a cacarear ruidosamente, la diosa no resistió la curiosidad y se asomó fuera de la cueva, abriendo apenas la entrada de la cueva. Un enorme luchador de sumo empujó entonces la roca, permitiendo salir al sol. Dicha cerca para los gallos fue el primer arco torī. Desde entonces, el torī se convirtió en símbolo de prosperidad y buena suerte y su uso se extendió por todo Japón.

octopus

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Los octópodos (Octopoda, del griego, octó, ocho y podós, "pies") son un orden de moluscos cefalópodos conocidos comúnmente como pulpos. Carecen de concha y poseen ocho brazos. Son animales marinos y carnívoros.
Se considera a los pulpos los invertebrados de mayor inteligencia.

C M Y K - 004

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Durante el viaje de Arua al lugar sagrado de los Black recordó los largos días que paso con su maestro, recordó la peculiar manera de instruirla en todas las artes que no se han de nombrar y recordó, como no, las noches en las que el sudor de su cuerpo se mezclaba con el del hombre que era en realidad su maestro tras aquella mascara impasible, imperturbable,
condena ineludible como único superviviente de su raza.

Abetse no estaba, todo el lugar parecía haber sido arrancado de las tierras remotas, transportado quizá a otro lugar en el espacio o en el tiempo.

Ninguna señal clara de que había sucedido, casi nada quedaba ya de lo que antes habitaba en aquella zona, el único testigo, un pequeño y viejo Ceratonia Siliqua (algarrobo) que aun se mantenía en pie.

Durante tres días y tres noches, rezo por la esencia de su maestro.

Dispuesta a marchar, ya en su montura, cerro los ojos y entono la ultima plegaria. Una suave brisa acaricio las hojas del retorcido árbol y un lejano susurro llego a oídos de Arua.

- Él pensó en ti cuando su tiempo aquí termino.
recoged la raíz de este, mi leñoso cuerpo y trasplantadla justo en el centro del bosque negro.